Thursday, August 17, 2006

LA ORDEN BONARIA, EN LA ESTELA CATARA.


En la Foto la Baronesa de Montferrand, en la estla Cátara

También llamados ‘buenos hombres’, la palabra cátaro procede del griego kazaros (puro). La religión cátara era puramente espiritual, desprovista de culto y de templo, la naturaleza era el marco ideal para elevar los rezos al dios de la Luz (tradición celta), y, como las religiones protohistóricas, estos altares solían elevarse en lugares que antes habían sido clasificados por las civilizaciones antiguas como enclaves sagrados; tal es el caso de la fortaleza de Montségur, que la Iglesia oficial no dudó en calificar de sinagoga del diablo.